En medio de la polémica que ha ocasionado la intervención de la EPS Sanitas por parte del Gobierno Petro, en horas de la tarde del miércoles, el superintendente nacional de Salud, Luis Carlos Leal, anunció que “en ejercicio de sus funciones de inspección, vigilancia y control ha tomado posesión de los bienes, haberes y negocios de la Nueva EPS«.
Nueva EPS es la prestadora de salud más grande del país, tiene 11 millones de usuarios y es la única con cobertura en prácticamente todo el país. Tiene el 19% de toda la población del régimen contributivo y el 16% del régimen subsidiado.
Según reveló el funcionario, hay razones similares para intervenir a las EPS Sanitas y Nueva EPS, puesto que ninguna de las dos cumple con los requisitos habilitados financieros para poder ejercer sus funciones, como son el patrimonio adecuado y el régimen especial de reservas técnicas.
Leal afirmó que esta decisión busca “garantizar que los recursos de la salud, primero, lleguen a donde deben llegar. Y segundo, que el derecho fundamental a la salud de las personas se respete».
El funcionario manifestó que después de “identificar peculiaridades y de ver con preocupación que se podía afectar dramáticamente la prestación de los servicios en salud los afiliados a la Nueva EPS, se tomó la decisión de intervenirla, luego de un análisis al interior del Comité de Medidas Especiales de la Superintendencia Nacional de Salud.
Agregó que, además, existen indicadores como el aumento dramático de las Peticiones, Quejas, Reclamos, Solicitudes y Denuncias (PQRSD), que se traducen en que las personas afiliadas a estas no están viendo una adecuada satisfacción de sus necesidades en salud.
Cabe mencionar que horas antes del anuncio, el presidente Gustavo Petro denunció una falsa contabilidad en Nueva EPS, asegurando que seis billones de pesos girados por el Gobierno Nacional a la Nueva EPS no se utilizaron para financiar la atención en salud de sus afiliados.
La decisión ha causado fuertes críticas con el Gobierno, opositores y funcionarios del sector de la salud ven estas intervenciones como una forma de imponer la reforma a la salud, esto teniendo en cuenta que la iniciativa del mandatario fue archivada durante su discusión en el Senado.
