Por: William Calderón Z.
Se ha puesto en marcha un verdadero cerco ideológico contra el Estado de Derecho, las libertades, el emprendimiento, la empresa privada, las fuerzas armadas y de policía, el sector minero energético, el deporte colombiano, la salud y el empleo. Es decir, contra la Colombia decente, la que está plantada sobre pilares para el progreso y el bienestar de los ciudadanos, la que crea empleo, exporta bienes y servicios, la que busca la justicia, la equidad, el desarrollo dentro del orden y respeto a las instituciones.
La política regresiva
El cambio no es otra cosa que una política regresiva a ideas y acciones cuyo fracaso ya ha sido probado, siguiendo los manuales de Gramci, Tony Negri, Hugo Chávez Frías y Daniel Ortega, teniendo como máximos inspiradores a Fidel Castro y al justicialismo asistencialista argentino. Trátase del estado como único propietario de los bienes y servicios de la patria, en consonancia con un Plan de Desarrollo que no solo nos atrasa en el tiempo, sino que de manera contundente nos deja por fuera de la revolución industrial y tecnológica que se está desarrollando en el mundo.
Petro y las reiteradas traiciones
Petro ha sido bien descrito por quienes lo conocieron como militante del M19. Antonio Navarro señaló hace unos años que el actual Presidente de la República “no se había desmovilizado”. Tras la lectura de su autobiografía, Carlos Alonso Lucio se admira de la capacidad de mentir que ostenta el líder de la Colombia Humana. Todos los hechos que se atribuye respecto a la paz firmada por el M19 con el Estado colombiano, no son más que la suplantación del nombre de Carlos Pizarro León Gómez, por el suyo. En su última columna en Las Dos Orillas, Lucio señala los alcances de las reiteradas traiciones de este personaje que alcanzaron ya a su hermano Juan Fernando y a su hijo Nicolás.
Los hechos son tozudos
Juan Fernando Petro fue a las cárceles con el embeleco del “perdón social”, no por iniciativa propia. Lo hizo en desarrollo de la campaña electoral para asegurar los votos que controlan grupos ilegales de alto impacto como la Nueva Marquetalia y las FARC en armas. De ahí su cercanía con ‘Douglas’, ‘Tom’ y ‘Messi’, por citar algunos de los jefes de las bandas criminales. Y la vuelta de Juan Fernando Petro se completó con la solicitud de levantamiento de 20 detenciones y órdenes de captura de verdaderos capos, a lo cual se opuso el Fiscal General de la Nación. Aseguraron unos votos y los hechos indican que el gobierno ha querido no solo excarcelarlos, sino también permitir que mantengan un porcentaje de su dinero mal habido. Es una cadena, no una acción intrépida del hermano mayor de Gustavo Petro Urrego.
El talante del nuevo gobierno
Impúdicamente derrochador. Edredones de plumas de ganso. Nerú aún dicta clases de baile y entrenamiento físico a la élite de la Casa de Nariño. Francia Márquez llega a su casa en Cali, en helicóptero. Las amigas y vecinas de Verónica Alcocer son nombradas embajadoras, directoras de instituciones públicas, cónsules. También la señora Alcocer parece que causa renuncias y salidas de funcionarios públicos, como en el caso de Patricia Ariza del Ministerio de Cultura. El secretario del Departamento Administrativo de la Presidencia de la República, hace cruces non santos vía telefónica.
El trágico novelón
Y el trágico novelón de Nicolás Petro, recibiendo plata a diestra y siniestra para la campaña electoral de su padre, dineros que no fueron reportados, agravando aún más la situación que ha expuesto el Consejo Nacional Electoral, el cual ha comunicado que se volaron los topes permitidos en la contienda que terminó con el triunfo, discutido aún, de Gustavo Petro. La investigación que ya inició la Fiscalía dirá qué delitos o no, pudo haber cometido el hijo mayor del actual Presidente de la República.
Falta de carácter
A esta altura del partido, es menester recordarles a los comandantes de las fuerzas militares y de policía que estos cuerpos son de la Nación, no del gobierno de turno. Ustedes tienen el deber patriótico de defender la vida, honra y bienes de los ciudadanos, la integridad territorial e incluso pueden desobedecer órdenes que sean inconstitucionales.
La entrega del país al delito
Ser cómplices de la entrega del país al delito y sus actores diversos, no enaltece a los generales de la República. Un buen soldado defiende a los suyos. Dejar que policías y soldados sean humillados, maltratados, degollados y secuestrados a la vista del mundo, es una mancha y un cargo de conciencia que les acompañará el resto de sus vidas. No hay justificación alguna para no haber atendido los gritos de auxilio de quienes padecieron la crueldad, la sevicia y la violencia física y emocional en Los Pozos, Caquetá… Hace mucha falta el carácter que exhibieron en su tiempo, Fernando Landazábal Reyes y Álvaro Valencia Tovar.
El Partido Conservador
El Fincho Cepeda está feliz porque le nombraron a Roger Carrillo en Coljuegos. El Directorio Nacional de la colectividad ha centralizado en sus oficinas la inscripción de candidatos a las elecciones venideras de octubre. Es decir, dejaron sin funciones a los directorios municipales y departamentales. Ya hay personas, fichas de los congresistas que hacen parte del Directorio, que se pasean por algunos municipios de Colombia, diciendo que tienen el aval del Partido en contra de la dirigencia mayoritaria en esos lugares.
Que se investigue cuanto antes…
El Tribunal de Ética debe ya investigar los contratos de tres personas, supuestos enlaces de las directivas nacionales con las departamentales, que nadie conoce o ha visto que realicen alguna tarea al servicio de la colectividad. Recuérdese que estos son dineros públicos que no pueden feriarse para satisfacer apetitos burocráticos de quienes, si no rectifican el camino que escogieron, enterrarán al Partido Conservador. ¿Será que esto le importa al Fincho?
¡Con mayúscula!
Es hora de decir no más daño a la institucionalidad de un partido respetable que continuará sembrando los valores que lo erigieron: honestidad, respeto a la ley, a la democracia, a la justicia y a Dios.
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