Por: William Calderón Zuluaga
El poderoso Comité
Después de la arenga del señor Nelson Alarcón representante en el “Comité del Paro”, quien destapó los verdaderos objetivos de dicho Comité, además del miembro que había participado, quien, además, salió libre por vencimiento de términos (y de su reconocida dirección de los bloqueos delictuales)… La realidad es que éste famoso Comité es quien tiene el mayor poder político en Colombia.
¿Y gracias a quién?
No a la representatividad de sus miembros, ni a su prestancia personal, ni a la forma en que fueron elegidos que no se sabe cómo, ni a los objetivos altruistas, sociales y de equidad e igualdad que como fachada dicen defender… Se debe única y exclusivamente al Gobierno que primero aceptó que llegaran a Palacio y para ello les creó una mesa. No cualquier mesa. Increíblemente fue más allá de lo que este grupo espurio pedía y era ser oído, y los convirtió y legitimó en “negociadores o pares”, donde quien nos representa a todos estaba dispuesto a “negociar y entregar” a cambio de que cesara un paro y unos bloqueos ilegales, los cuales continúan.
Huérfanos de dirección y defensa
Y ahí estamos… El Comité que hace lo que le viene en gana y sin sonrojarse se para de la mesa y declara abiertamente sus objetivos políticos y partidistas. El Gobierno incapaz y atolondrado prometiendo acciones que poco se concretan.
Los actores de esta tragedia no de Esquilo, sino de Ripley, nos ilustran el tamaño de la misma: Ceballos y Alarcón y recientemente el patético Archila.
Y en el medio el País y su economía en proceso de destrucción. Huérfano de dirección y defensa.
¿Quién es el responsable?
Todo ha sido responsabilidad del Gobierno y de quien lo dirige, puesto que desde un principio ha debido tener la altura y el talante y sentido de su cargo, lo que el manejo de este asunto requería. Y lo más importante, lo que la Constitución y la Ley le exigían…
Otra situación y otros costos tendríamos hoy en día y otro futuro se avizoraría. El Presidente no ha cumplido con sus funciones y ha actuado permitiendo la creación del poder de facto que hoy es quien manda en el País. Por omisión y por acción es responsable.
“Una Democracia resiste 30 días de desabastecimiento, mientras una dictadura COMUNISTA, soporta 70 años de hambruna”. José Alvear Sanín
