Era noche de final en Bucaramanga y el ambiente en y alrededor del estadio Alfonso López era de alegría. El humorista José Ordóñez, en la previa, invitó a los hinchas locales a no maltratar a los hinchas de afuera, lo que rápidamente se volvió viral y fue visto como un gran mensaje por parte del otrora presentador y libretista de Ordóñese de la Risa.
El estadio, como no podía ser de otra forma, recibió prácticamente colmado a los jugadores locales, que esperaban dar un paso definitivo para, de una vez por todas, quedarse con el primer título de la historia, en la segunda final a la que acceden, desde 1997. Con estas atenuantes arrancó el juego, que a lo largo de la primera mitad fue cerrado, con muy pocas opciones y sin muchas emociones.
Al final del primer tiempo, ninguno de los equipos había logrado imponerse, por lo que se fueron a las duchas con el empate a cero. Ya al regreso, el leopardo mantuvo la agresividad, apostándole a la salida rápida y a recuperar rápidamente el balón. Justamente de esta forma, llegaría el único gol del partido, de la mano de Freddy Hinestroza.
Al minuto 69, John Córdoba logra desbordar por la banda derecha y, justo antes de llegar hasta la última línea, lanzó un centro buscapiés que ninguno de los defensores pudo despejar. El balón le quedó a Hinestroza quien, sin remordimiento, mandó el balón al fondo para la única anotación del encuentro.
Santa Fe lo intentó, aunque tímidamente. Logró pisar el área de Aldair Quintana y disparar, pero siempre encontraron al jugador muy bien parado en el área, por lo que, al final, el cardenal debió aceptar la derrota y preparar todo para el juego del próximo sábado 15 de junio, sobre las 7:30 de la noche, ahora en el estadio Nemesio Camacho ‘El Campín’, de la ciudad de Bogotá, y donde Santa Fe espera recuperar lo perdido en este juego de ida.
