“LA SIRENA CANTORA”, DE ANTONIO CABALLERO

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Por: William Calderón Z

Demoledor

Crítico duro, demostró en su libro sobre la historia de Colombia, ese espíritu insular rebelde, distante. Demoledor, con dialéctica contundente dice las cosas como le da la su libre gana. Por eso, en cuantos medios ha escrito, los directores saben que con su carácter y su talento independiente no se puede jugar…Su pariente Felipe López, quien lo conoce a fondo supo siempre, como antiguo y poderoso dueño de la revista Semana, que los dibujos y las columnas de opinión de Caballero, no se podían torear, sino tolerar y respetar, con sumo cuidado, en El. Espectador y El Tiempo, así lo saben bien.

Amante de los toros se ha enfrentado, en ese arte, a una mezcla preciosa de arte, religión y tradición cultural, a los animales, y a los animalistas.

La Sirena cantora

Ahora, enfrentando la idolatría insulsa de muchos, por la niña Mancha, que, con libreto afortunado de Fernando Gaitán, inundó a Colombia de Aroma de Café, la dama otoñal que tanto llegamos admirar y ahora desconcierta en su deslucido papel de amargada y pregonera otoñal de Gustavo Petro y al mismo Petro, Antonio Caballero, ha cogido el toro de la ” Real politik” nacional por los cuernos. Ha hecho la mejor caricatura del combatido y adulado, por cuenta de recientes y discutidas encuestas del líder de la Colombia Humana. De quien dice ” No importa mucho lo que recite Margarita Rosa de Francisco —para eso es una actriz— sobre el “Pacto Histórico”, así denominado por Gustavo Petro”…y continua Caballero…”Y se ha dejado captar por lo que yo hace un par de meses llamaba las engañosas “voces de sirena” de Gustavo Petro y de su colega senador, y guionista de televisión, Gustavo Bolívar, Pero está vendiendo un farsante. Y una farsa”.

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Profilaxis A Petro

Sin dicterios, pero con firmes y contundentes argumentos Caballero ha hecho un perfil nítido, estudiado, profundamente cierto, y arrolladoramente, convincente, del peligro que representa para la democracia colombiana, este demagogo populista, locuaz e irresponsable, a quien unos temen, otros odian, muchos en los estratos altos desprecian y ridiculizan, y otros adoran en sectores inconformes de Bogotá, y la Costa.

Producto de las Encuestas

Si no fuera por encuestas recientes, retratos del momento, algunos políticos oportunistas como Roy Leonardo Barreras Montealegre y Benedetti, no estuvieran al lado de Petro, los radicales del CD, y de la fanática ultraderecha, lo retratan como el monstruo bicéfalo, el temido ex guerrillero, que amenaza con arrasar, si llega a ganar, con vida, bienes y tradiciones de los colombianos. Dicen todos que hay que atajarlo, como sea.

Pues ni los trinos de los recalcitrantes, ni los alaridos de pánico de los oligarcas, han logrado hacerle ni cosquillas a Petro, que ya se siente presidente, y si alguien, se lo pone en duda dice, desde ya, sobre seguro que le van a robar las elecciones.

Petro al desnudo

Antonio Caballero, con precisión de cirujano, primor de caricaturista, escritor versado, veterano y tozudo, hombre de izquierda radical y pura, ha desnudado en su magistral, columna a Gustavo Petro, como en verdad es, autoritario egoísta, yoista, con pretensiones de arrasador caudillo hitleriano. Ese arrogante Petro, jamás soñó que la columna del más respetado columnista, escritor e historiador de la izquierda colombiana, fuera el que logro la hazaña de dibujarlo, tal como es, sin exageración con crítica justa, incisiva y realista.

Conclusión

Con la comentada y explosiva columna de Antonio Caballero. han ocurrido dos cosas trascendentales: Una Petro si es como él lo ha pintado. Otra, Antonio ha demostrado, en un país de fletados de insulsos, de calculadores y tibios, mediocres, que, haciéndole honor a su trayectoria, no es el caballero de la triste figura, sino, así, con mayúscula, el CABALLERO DE LA COHERENCIA, en un país sin brújula, reino de la incertidumbre, la hipocresía, el oportunismo y la incoherencia.

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Por eso recomiendo la lectura de la última columna de Antonio Caballero “La sirena cantora”

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