El ‘glotón’ fue condenado a prisión y tendrá que pagar una multa de más de tres millones de pesos.
ace poco se conoció el caso de un joven de China, de 23 años, quien comió pollo de KFC de forma gratuita durante seis meses.
¿Cómo lo hizo? Xu, como se identificó el sujeto, encontró un error en el sistema de pedidos de la ‘app’ del establecimiento comercial y lo aprovechó para su beneficio.
De acuerdo con el medio estadounidense ‘Newsweek’, el ‘modus operandi’ de Xu consistió en utilizar cupones de KFC para pedir los alimentos que deseaba, sin embargo, nunca realizaba la orden de manera completa y, en paralelo, exigía el reembolso del cupón que, supuestamente, se desperdiciaba.
Desde entonces, Xu empezó a comer gratis y, además, inició la venta de comida que le llegaba a un precio menor al valor original. En principio, sus clientes fueron sus amigos de la universidad, quienes terminaron uniéndose a la estafa tras conocer el ‘truco’ de la comida infinita de KFC.
De acuerdo con el medio local ‘The Paper’, el hecho ocurrió en distrito de Xuhui, entre mayo y octubre de 2018. El caso volvió a tomar relevancia luego de que hace poco se conociera la decisión de las autoridades locales sobre el caso.
Según el medio chino ‘Global Times’, el Tribunal Popular del Distrito de Xuhui, situado en la ciudad de Shanghái, condenó a Xu a dos años y medio de prisión por el delito de fraude y estafa. También deberá pagar una multa económica de 932 dólares (un poco más de 3 millones de pesos).
Otras cuatro personas implicadas en la estafa fueron sentenciadas a condenas entre 15 meses y dos años de prisión. Ellos podrían pagar multas que van desde los 155 dólares (alrededor de 567 mil pesos) hasta los 621 dólares (un poco más de dos millones de pesos).
De acuerdo con ‘Global Times’, Xu y compañía fueron descubiertos tras una exhaustiva investigación de las autoridades locales, quienes estimaron que los delincuentes habrían recaudado 31 mil dólares (más de 113 millones de pesos) antes de la desmantelación de su ‘tráfico’ de comida de KFC.
Fuente: El Tiempo.
