En medio del operativo se dio captura al hombre que comercializaba estos medicamentos, a quien la Policía ya le había cerrado una droguería, pero que ahora almacenaba las medicinas en su casa.
En Medellín la Policía incautó 32.429 unidades de medicamentos avaluados en 50 millones de pesos, adquiridos y comercializados de manera irregular.
Algunos de los medicamentos habían sido ingresados al país por contrabando, pues no cuentan con la aprobación del Invima, mientras que otros están dentro de la categoría de control especial por su capacidad de producir dependencia o adicción.
Asimismo, se incautaron 182 unidades de Midazolam en ampolla, medicamento esencial en unidades de cuidados intensivos.
“Algunos de estos medicamentos son primordiales en las UCI para atender pacientes COVID. También había insulinas que no cumplían con la cadena de refrigeración”, comentó el coronel Camilo Torres Pineda, subcomandante de la Policía Metropolitana.
En medio del operativo se dio captura al hombre que comercializaba estos medicamentos, a quien la Policía ya le había cerrado una droguería, pero que ahora almacenaba las medicinas en su casa.
El capturado deberá responder por los delitos de corrupción de alimentos y enajenación de medicamentos.
Otro golpe a la adulteración esta vez en la Costa Atlántica
¡Golpe a red delincuencial dedicada a la adulteración de medicamentos de alto costo y de uso restringido e institucional! 13 presuntos integrantes de la organización fueron capturados y más de una tonelada de productos farmacéuticos, incautada.
Entre los detenidos se encuentra la propietaria de una cadena de distribución de medicamentos en la Costa Atlántica, así como quienes se encargarían de borrar las fechas de expiración y los lotes de fabricación de productos vencidos o de contrabando.
En 19 allanamientos a las sedes de dos distribuidoras farmacéuticas, cinco droguerías y bodegas, autoridades incautaron medicamentos para el cáncer, la diabetes, el VIH, entre otras enfermedades de alto riesgo. El valor de los tratamientos por unidad podría alcanzar los $15’000.000.
Esta estructura, al parecer, obtenía medicamentos vencidos y descompuestos de diferentes puntos del país o los traían de Venezuela y Ecuador para
posteriormente, eran trasladados a centros de acopio en la Costa Atlántica donde eran adulterados para su distribución y comercialización.
