Por medio del Sistema Local de Áreas Protegidas —SILAP— se construyen las estrategias con el fin de preservar las áreas que son susceptibles de conservación y protección dentro de un municipio.
Con ese propósito, en Bello, la Administración Municipal, Corantioquia y el Tecnológico de Antioquia comenzaron a ejecutar, en enero de 2021 hasta este mes de septiembre, un proyecto de tales características, que es también una invitación para que los bellanitas conozcan su territorio, lo quieran y lo protejan y a los municipios para que se apropien de este instrumento, se comprometan a que sea una realidad, se enamoren de toda esta diversidad y sean los que garanticen que lo que se está formulando es la vida en el territorio a corto, mediano y largo plazo.
“El SILAP, es una forma de darle a los seres humanos, a la fauna y flora, la oportunidad de poder evolucionar con los años. Propone una estructura ecológica principal que se pueda incorporar al Plan de Ordenamiento Territorial de los municipios, la cual permitirá su adaptación a los cambios climáticos y a la posibilidad de escases de agua”, destaca el coordinador del proyecto, Juan Camilo Hinestroza Farfán, ingeniero civil, magíster en Ingeniería y docente del Tecnológico de Antioquia.
Con este sistema se pretende un territorio biodiverso, amigable, imprescindible, incluyente, sostenible; crear la cultura del buen uso de los recursos naturales y proteger el patrimonio ambiental y cultural, la biodiversidad, y los servicios ecosistémicos indispensables para el desarrollo económico, social y ambiental de los municipios antioqueños. Es un proyecto vital, que tiene que ver con fauna silvestre, la flora, los ecosistemas acuáticos, los sistemas de información geográfica y una perspectiva social de las comunidades.
En la ejecución del proyecto en Bello, el SILAP consta de tres etapas: Diagnóstico, donde se determina el estado actual de la biodiversidad en el municipio; Planificación, donde a partir de criterios biológicos se determinan los valores objeto de conservación y se ejecuta una estrategia de participación ciudadana para que sea la comunidad quien aporte a la construcción y formulación de las áreas de conservación y protección.
Finalmente, se pasa a la etapa de reglamentación con un proyecto de Acuerdo por parte del Concejo Municipal para que pueda ser integrado posteriormente al POT. Las áreas biopriorizadas son la parte norte del Cerro Quitasol, insignia del Valle de Aburrá, que toca a varias localidades y en el que Bello tiene sectores demarcados como protegidos, entre ellos: Holanda, Piamonte, Granizal y Escarpe Occidental, que es un corredor ecológico. En los últimos años, cada vez cobra más fuerza, el papel que juega el ambiente para el ser humano.
Se ha evidenciado que el crecimiento poblacional, así como los hábitos de consumo han ido deteriorando rápidamente el ambiente. De ahí, la trascendencia del SILAP, que, para el TdeA, es muy significativo, dado que proyecta la función del programa de Ingeniería Ambiental, transfiriendo los conocimientos a la sociedad y aportando al desarrollo sostenible.
