¿Por qué una gibón hembra que vivía sola en su jaula tuvo una cría?

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Luego de una prueba de ADN de su cría, el zoológico ha descubierto quién es el padre, e incluso tiene una teoría sobre cómo se aparearon los gibones. © Zoológico de Kujukushima

Los cuidadores del Zoológico de Kujukushima, en Japón, explicaron que este caso era inaudito y les llevó dos años descubrir la razón detrás del nacimiento del simio.

Hace dos años, en 2021, el zoológico de Nagasaki, Japón, presenció un misterioso hecho: Mono, una hembra gibón de manos blancas, estaba embarazada, algo que parecía imposible debido a que el primate vivía solo desde hace 12 años y en su cotidianidad no interactuaba con otros miembros de su especie.

Ahora los trabajadores del Parque Nacional Saikai del Zoológico y Jardín Botánico de Kujukushima, en la prefectura de Nagasaki, creen por fin haber resuelto el acertijo. Tras el nacimiento del animal, decidieron recoger muestras de excremento y pelo para ser cotejados con otras muestras de cuatro machos que podrían ser sus padres.

Después de realizar las pruebas, encontraron que el padre de la cría era un mono de 34 años llamado Itoh pero, ¿cómo fue posible?

De acuerdo con el periódico The Mainichi, de Japón, tanto Momo como Itoh estaban separados por jaulas y mallas metálicas pero habían logrado aparearse a través de un pequeño orificio en una placa de acero entre sus recintos. El agujero medía unos 9 milímetros (0.8 pulgadas) de diámetro.

“Momo e Itoh se turnaban para ser expuestos por la mañana y por la tarde, en una zona de exhibición situada, justo enfrente de la jaula de Momo. Los dos espacios están separados por un tablero perforado que impide que los simios se mezclen. No obstante, todo parece indicar que el tablero parece no haber logrado su cometido”, detalló a Vice Jun Yamano, superintendente del zoológico, quien también aclaró que la investigación sobre el origen del pequeño primate tardó dos años porque no podían acercarse al pequeño animal debido a que su madre era muy sobreprotectora.

La cría, macho, de aproximadamente dos kilogramos, aún no tiene nombre pero está “creciendo saludablemente” bajo la atención amorosa de Momo, afirmaron los funcionarios del zoológico.

La jaula vulnerada fue puesta en mantenimiento para evitar nuevos embarazos no deseados. Sin embargo, de acuerdo con el superintendente del zoológico, estudian la posibilidad de que Momo, Itoh y la cría convivan juntos.

“Primero tienen que acostumbrarse el uno al otro. Pero esperamos que vivan juntos como una familia”, concluyó Yamano.

Fuente: El Espectador.

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