Para poder realizar el proceso de reconstrucción, los expertos se basarán en el diseño de modelos 3D para después dar luz verde a la producción de la extremidad que no dura más de 2 semanas.
Esta tecnología desarrollada por especialistas rusos, ha supuesto un avance inminente en la creación de estas partes del cuerpo, ante el conflicto ruso-ucraniano y las armas letales usadas en la guerra, las cuales retan a los expertos para dar soluciones efectivas a sus combatientes como esta.
«A los pacientes con tales problemas, antes los tratábamos durante años, necesitaban uno, dos o tres años para recuperarse, ahora se necesita como máximo seis meses», declaró Evgueni Kukushko, jefe de la sección de reconstrucción y rehabilitación médica del hospital militar Burdenko en Moscú, quien participó en una de las decenas de operaciones con esta tecnología, indicó Actualidad RT.
¿Cómo funciona?
En principio, se realiza el implante y se obtiene mediante impresión 3D para luego ser instalado en el área afectada, el paso a seguir es que se rellena con elementos de tejido óseo cultivados especialmente con células madre de la persona herida, seguido de la adición de tejido muscular y fragmentos del cuerpo del paciente, explica Leonid Brizhán, subjefe de la traumatología de las Fuerzas Armadas de Rusia y vicedirector de la institución, tal como recoge Actualidad RT.
«Me disparó un francotirador, la bala impactó en la zona de la rodilla, me reconstruyeron la pierna por fragmentos” agregando «Por mi propia experiencia, puedo juzgar que en el hospital Burdenk actualmente se hacen operaciones que cuando yo estudié decían que eran imposibles de realizar», comentó el excombatiente que, además, es médico de formación.
Este tan solo es otro claro ejemplo del avance tecnológico de este tiempo, que ha servido como un aliado para la humanidad, también en lo que respecta a la Inteligencia Artificial. De acuerdo a Semana, otro trabajo realizado en relación y de gran importancia en 2021 fue cuando médicos en Israel reconstruyeron en 3D la tráquea de un niño de 7 años antes de operarlo. El menor padecía de sarcoma de Ewing (un cáncer de huesos y tejidos blandos), gracias a esta implementación, logró ser operado posteriormente para extirparle parte de su pulmón derecho y continuar con su tratamiento de quimioterapias y recuperación.
Entre tanto, en cuanto a los investigadores rusos, lo que esperan con su desarrollo es seguir avanzando y mejorando hasta lograr que los implantes sean biodegradables, lo que quiere decir que a medida que transcurre el tiempo se disuelven y no requieren ser retirados después, siendo la base para la formación del tejido óseo en el paciente, argumentó Brizhán.
Fuente: Colombia.com
