Hallan a menor desaparecido en Sudáfrica, castrado y moribundo entre matorrales

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Indignada y consternada se encuentra la comunidad a nivel mundial, tras el hallazgo de un niño que había sido raptado en Sudáfrica. El menor fue encontrado entre matorrales en pésimas condiciones y con mutilaciones en su cuerpo. 

El niño de seis años que había desaparecido el pasado 1 de marzo en Gauteng, Sudáfrica, fue encontrado por residentes locales en un estado de salud deplorable. Según reportaron los testigos, el pequeño estaba moribundo, pues presentaba una gran pérdida de sangre debido a la mutilación de sus genitales. 

De acuerdo con lo reportado por el diario The Mirror, al parecer, el niño habría sido secuestrado para practicar un ritual satánico con su cuerpo; sin embargo, por alguna razón no pudieron sacrificarlo y decidieron dejarlo a su suerte en un potrero. 

El medio citado informó además que, presuntamente, el menor habría sido raptado en una camioneta de color oscuro, luego de que le rociaran gas pimienta en su rostro. Los padres del infante no se han pronunciado al respecto.

Los gritos de auxilio del menor alertaron a la comunidad, quien de inmediato acudió a la zona y se encontró con la terrible escena. El niño estaba completamente ensangrentado y cuando buscaron el origen de las heridas encontraron que había sido castrado. 

Ante el hecho, pobladores se indignaron y exigieron a las autoridades seguridad para sus hijos ya que el grave hecho los pone en alerta de que los sujetos puedan intentar cometer el mismo acto en contra de otros menores, asimismo refirieron conocer al chico y aseguraron que el niño siempre estaba solo e incluso lo veían buscando comida pero regularmente se mostraba sonriente y educado.

“Aplicar gas pimienta al niño es bastante malo, pero cortarle los genitales es una barbaridad y ese niño tendrá problemas mentales por el resto de su vida”, señaló un residente que pidió permanecer en el anonimato al diario ‘The Mirror’. 

«Estoy considerando mudarme del área porque nos sentimos inseguros porque también tengo niños y no quiero que los ataquen», afirmó al respecto Chantel Naude, otro testigo de la atroz escena. 

El caso está siendo investigado por la policía sudafricana de Boksburg, según el comandante de la comisaría, el coronel Matshidiso Mbele. Por ahora, el menor permanece estable en un hospital de la ciudad.

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