El alcalde Daniel Quintero Calle participó este 23 de noviembre de la sesión de la Comisión Quinta del Senado de la República, espacio en el cual habló sobre las decisiones y acciones que tomó y emprendió respectivamente la actual Administración Distrital con Empresas Públicas de Medellín – EPM en el proyecto Hidroituango con el objetivo de cuidar la vida, el ambiente y la economía nacional.
“Primero, por la vida. Nadie que defienda la vida debe decir que no se debe poner a funcionar en este momento Hidroituango. Lo segundo, por razones ambientales, en las condiciones actuales significa apagar seis centrales térmicas en el país. Además, poner a funcionar a Hidroituango significaría una baja del 5 % en las tarifas de energía del país”, dijo el alcalde.
Durante su intervención el mandatario local hizo énfasis en que entendiendo que la hidroeléctrica debió entrar en operación desde el año 2018, fueron otros gobiernos y personas los que tomaron las decisiones que no permitieron que fuese así. Sin embargo, expresó que la actual administración expuso lo sucedido, señaló el ocultamiento de información y denunció a los responsables de la emergencia para que pagaran los daños y no la ciudadanía.
“Si Hidroituango no prendiera, entonces el otro año estaríamos hablando sin ninguna duda de racionamiento porque la demanda energética del país va creciendo y la tendencia no va a variar porque nosotros lo digamos. Y no va a variar, la pregunta es cual es la energía o la forma como se produce”, finalizó.
Además, sostuvo que EPM ha sido víctima de quienes tomaron decisiones que han generado pérdidas a la empresa por hasta $10 billones de los cuales resta recuperar cinco. “Cuando nos elegimos dijimos: sacaremos a Hidroituango adelante pero con la verdad, así duela, y recuperando la plata pública de los ciudadanos. Porque sanar estas heridas no es solo reparar los concretos, también es recuperar la confianza”, expresó.
Finalmente, el alcalde recordó que las pruebas que se han realizado en el proyecto han salido bien, sin vibraciones, lo cual significa que la generación de energía está garantizada y sería seguro para las comunidades aguas abajo.
