Dejar definitivamente el hábito de fumar tabaco, es la invitación que hace la Gobernación de Antioquia

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La pandemia por COVID19 es la mayor motivación a la que apelan las autoridades de salud, este 2021, para promover el no consumo de tabaco.

En Antioquia se sabe que los 12 años es la edad en la que se inicia con este hábito.

“El tabaco no afecta solo a los fumadores activos, el daño puede ser mayor en personas convivientes, los que conocemos como fumadores pasivos. Estas son razones más que suficientes para dejar de fumar y para ello, lo primero es tomar la decisión, poner todo el empeño y la voluntad para lograrlo”. Con esta apreciación, Luis Enrique Valencia, médico referente de riesgo cardiovascular de la Secretaría Seccional de Salud y Protección Social de Antioquia, advierte de la importancia de dejar de fumar, no solo por la salud individual sino colectiva.

A este argumento se suma el contexto actual de la pandemia, pues de acuerdo con el comportamiento de la COVID19 se ha identificado que los fumadores tienen mayores probabilidades de desarrollar síntomas graves de la enfermedad. Por esa razón, este año la Organización Mundial de la Salud, OMS, se ha propuesto impulsar la campaña: “Comprométete a dejarlo durante la COVID-19”. Así las cosas, está claro que nunca como hoy ha sido tan importante dejar de fumar y suspender todo sistema de dispensación de nicotina, pues de acuerdo con los expertos la exposición en todas sus modalidades es nociva.

“El tabaquismo mata a ocho millones de personas al año en el mundo, pero si los consumidores necesitan más motivación para abandonar este hábito, la pandemia constituye el perfecto incentivo”, así lo ha afirmado Tedros Adhanom Ghebreyesus, director general de la OMS.

Y es que más allá de las complicaciones que puede generar el tabaco en personas con COVID19, Valencia advierte también de la importancia del cigarrillo como precursor del cáncer de pulmón -en un 90% de los casos-, Enfermedad Pulmonar Obstructiva Crónica (EPOC), -en un 15 a 20% de los fumadores-, afectaciones a las arterias, el corazón y el cerebro, “convirtiéndolo en una de las principales causas de mortalidad por enfermedad cardio cerebrovascular”, agrega.

Más consecuencias

Entre otras enfermedades, el tabaco también es causa de cáncer de laringe, esófago, cavidad oral y vejiga. Trastornos cardiovasculares, como cardiopatía isquémica, accidentes cerebrovasculares y las arteriopatías periféricas. No se desconoce tampoco sus implicaciones en el embarazo y el feto.

Se sabe además de otros efectos como:
• Disfunción eréctil.
• Disminución de la capacidad cognitiva.
• Respuesta inmunológica disminuida.
• Mal aliento, coloración amarilla en los dientes, periodontitis y uñas amarillas.
• Envejecimiento prematuro.
• Aumento del riesgo de padecer asma y otitis media.

En definitiva, con más de 7 mil productos químicos de los que, al menos, 250 son nocivos y más de 50 provocan cáncer, abandonar el tabaco es la principal causa prevenible de enfermedad cardiovascular y muerte, pues está claro que el tabaquismo es un hábito que reduce la supervivencia en cerca de 10 años.

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